Fisioterapia de la ATM

La fisioterapia de articulación témporo-mandibular (ATM) se encarga de restaurar la función y la movilidad de la ATM buscando una posición fisiológica, una simetría en el movimiento, un correcto tono muscular, una mejora en la alineación corporal y una adecuada higiene postural. De esta forma se mejora la repartición de cargas en la articulación y se evitan problemas degenerativos y funcionales.

Fisioterapia de la ATM

La fisioterapia de articulación témporo-mandibular (ATM) se encarga de restaurar la función y la movilidad de la ATM buscando una posición fisiológica, una simetría en el movimiento, un correcto tono muscular, una mejora en la alineación corporal y una adecuada higiene postural. De esta forma se mejora la repartición de cargas en la articulación y se evitan problemas degenerativos y funcionales.

Es la articulación situada entre el cráneo y la mandíbula, la cual nos permite masticar, tragar y hablar. Es quizás una de las más complejas de nuestro cuerpo, y es crucial que funcione de forma equilibrada y simétrica (izquierda y derecha).
Cuando esta articulación no trabaja correctamente puede provocar las siguientes afecciones:

Luxación de disco con reducción

Sucede cuando el disco articular se desliza hacia delante provocando una asimetría en los movimientos de la mandíbula. Durante el movimiento de apertura de la boca el disco vuelve a su sitio produciendo en ocasiones un “click” en la articulación. A veces suele acompañarse de problemas musculares y/o articulares.

Luxación de disco sin reducción

Pasa lo mismo que en el caso anterior con la diferencia de que el disco no vuelve a su posición inicial, limitando esto la apertura de la boca. También aumentará la presión en la articulación, pudiendo provocar artrosis en ella acompañada de inflamación.

Síndrome del disco adherido

El disco no se desplaza normalmente quedando fijo durante los movimientos de la mandíbula. En este caso el primer tratamiento sería uno quirúrgico, realizado por un cirujano maxilofacial, seguido de fisioterapia para mejorar la movilidad y el control de la mandíbula.

Fracturas

Normalmente son producidas tras un traumatismo a nivel de la mandíbula y suelen requerir intervención quirúrgica. A continuación, es necesaria una adecuada rehabilitación para recuperar una movilidad y una función lo más correctas posible.

Bruxismo

Es una actividad oral que se caracteriza por apretar y/o rechinar los dientes durante el sueño. En la sociedad actual es muy común y suele acompañarse de despertares nocturnos, lo cual provoca fatiga general, al no haber un buen descanso, y fatiga de la musculatura masticatoria. Además, en algunos casos aparecen dolores de cabeza, problemas cervicales o incluso patologías articulares como la luxación de disco, debido a la presión a la que está sometida la articulación al apretar.

Es la articulación situada entre el cráneo y la mandíbula, la cual nos permite masticar, tragar y hablar. Es quizás una de las más complejas de nuestro cuerpo, y es crucial que funcione de forma equilibrada y simétrica (izquierda y derecha).
Cuando esta articulación no trabaja correctamente puede provocar las siguientes afecciones:

Luxación de disco con reducción

Sucede cuando el disco articular se desliza hacia delante provocando una asimetría en los movimientos de la mandíbula. Durante el movimiento de apertura de la boca el disco vuelve a su sitio produciendo en ocasiones un “click” en la articulación. A veces suele acompañarse de problemas musculares y/o articulares.

Luxación de disco sin reducción

Pasa lo mismo que en el caso anterior con la diferencia de que el disco no vuelve a su posición inicial, limitando esto la apertura de la boca. También aumentará la presión en la articulación, pudiendo provocar artrosis en ella acompañada de inflamación.

Síndrome del disco adherido

El disco no se desplaza normalmente quedando fijo durante los movimientos de la mandíbula. En este caso el primer tratamiento sería uno quirúrgico, realizado por un cirujano maxilofacial, seguido de fisioterapia para mejorar la movilidad y el control de la mandíbula.

Fracturas

normalmente son producidas tras un traumatismo a nivel de la mandíbula y suelen requerir intervención quirúrgica. A continuación, es necesaria una adecuada rehabilitación para recuperar una movilidad y una función lo más correctas posible.

Bruxismo

es una actividad oral que se caracteriza por apretar y/o rechinar los dientes durante el sueño. En la sociedad actual es muy común y suele acompañarse de despertares nocturnos, lo cual provoca fatiga general, al no haber un buen descanso, y fatiga de la musculatura masticatoria. Además, en algunos casos aparecen dolores de cabeza, problemas cervicales o incluso patologías articulares como la luxación de disco, debido a la presión a la que está sometida la articulación al apretar.

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